Un científico argentino transforma los residuos de yerba mate en un valioso bioaceite
Un científico argentino presentó una técnica para convertir residuos de yerba mate en un bioaceite utilizable como fuente de energía. El equipo de investigación describe el avance como un paso relevante dentro de los esfuerzos por aprovechar subproductos de la industria. Señalan que, de consolidarse, podría generar oportunidades para la economía regional y mejorar la gestión de residuos derivados de la producción de yerba mate.
El proyecto se desarrolló en un laboratorio de una institución argentina y se centró en desechos obtenidos en plantas procesadoras de yerba mate. Estos residuos, que hoy se gestionan de forma dispersa o se desechan, podrían convertirse en materia prima para un líquido energético, reduciendo impactos ambientales y aportando valor agregado.
El bioaceite obtenido podría servir como combustible líquido o como base para la producción de otros productos químicos, según las pruebas de laboratorio. Los científicos señalan que el proceso intenta evitar residuos peligrosos y busca mantener bajo consumo de energía durante la conversión, lo que aumentaría su viabilidad.
La iniciativa forma parte de un enfoque de economía circular y promueve la diversificación de la matriz energética. Al convertir un residuo regional en un recurso, se busca disminuir la dependencia de combustibles fósiles y generar posibilidades para la innovación tecnológica local.
El método, explicado por el equipo, implica la preparación de la biomasa, una serie de reacciones controladas y una purificación para obtener el líquido. Los investigadores señalan que la calidad del bioaceite depende de la pureza de la materia prima y de ajustes en las condiciones de la conversión.
Aun en fases iniciales, advierten sobre la necesidad de validar resultados a mayor escala, realizar análisis de costo-beneficio y verificar la estabilidad del bioaceite para usos industriales. También mencionan la importancia de la aceptación regulatoria y de la viabilidad logística para futuras transferencias tecnológicas.
El estudio recibió apoyo institucional y mantiene abiertas las posibilidades de trabajar con empresas del sector agroindustrial para avanzar hacia una planta piloto y posibles acuerdos de implementación. Los investigadores planean difundir los resultados en revistas técnicas y presentar el proyecto en foros científicos.
Si se consolida la tecnología, el bioaceite podría contribuir a la diversificación energética de la región y a la gestión más sostenible de los residuos de yerba mate, especialmente en Tucumán y zonas productoras. El desarrollo podría generar puestos de trabajo y favorecer la innovación en la cadena de valor de la yerba mate.
Fuente: losprimeros.tv | Leer la nota completa